viernes, 8 de abril de 2016

Piromaníacos, pasión destructiva por el fuego

En el mundo de la Criminología uno de los grandes desafíos está en lidiar con sujetos que son verdaderas víctimas de un Trastorno Psicológico que los domina, condiciona sus impulsos y su voluntad, y hasta supone un riesgo inclusive para ellos mismos, pudiendo poner en peligro a los demás tanto como a su propia vida; aunque por el contrario tendremos el desafío de dar fehacientemente una respuesta de qué se puede hacer con ellos y si tienen una solución para su reinserción social.

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En esta ocasión, traemos a colación un tema que suele aparecer en noticieros al menos una vez al año, siendo la Piromanía frecuentemente aplicada a casos de Vandalismo en Vía Pública, donde se dañan automóviles, cestos de basura, contenedores o bien locales comerciales, resultando en daños que suponen un elevado perjuicio económico para sus responsables.

¿Qué es la Piromanía?

Como hemos mencionado anteriormente, se trata de un trastorno estrictamente emparentado de las Psicopatías, siendo el sujeto incapaz de controlar los impulsos que lo llevan a deleitarse con la presencia de Fuego o Llamas y llevándolo a la elaboración, producción y desarrollo de Distintos Grados de Incendios, desde los más pequeños como encender un fósforo, una antorcha o una vela sin necesidad, solo para saciar esta necesidad, hasta desencadenar Incendios a Gran Escala.

Como todo psicópata, el alivio gira en torno a una sensación de Poder y Control, colocándose en una situación de superioridad hacia el entorno donde esté realizando esta actividad y teniendo un punto de Tensión o Atracción que gira en torno a la deliberación (de diversa intensidad) a la hora de iniciar el fuego, que es seguido de una Relajación o Satisfacción en la que ver el fuego o un objeto ardiendo (o inclusive, otras personas) permite aliviar su necesidad.

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¿Pirómanos o Incendiarios? Cómo diferenciarlos

En primer lugar, debemos mencionar que el Pirómano no puede controlar fácilmente estos impulsos, ya que tiene una necesidad que le controla su voluntad y hasta puede echar la culpa de ello al entorno donde se está desenvolviendo o buscar las excusas más ilógicas e irrisorias para justificar su accionar, siempre teniendo la necesidad de ser una Parte Activa en el suceso, provocando incendios solamente para poder apaciguar sentimientos que lo angustian (desde Tristezas hasta Agresividad)

Es entonces el sujeto solamente capaz de saciar estas necesidades y volver a un equilibrio mediante Encender un Fuego, tomando parte activa de la combustión y propagando o bien apagando el incendio, siempre buscando tener el control total de la situación o bien satisfacerse al lograr una destrucción total de lo que haya combustionado.

En contraposición a ello tenemos a los Incendiarios que no tienen esta necesidad de saciar un impulso interno, sino que por el contrario provocan incendios por factores completamente externos, desde Cobro de Seguros hasta motivaciones que van desde la Venganza Pasional hasta el Ocultamiento de otro Delito.

Incendiario

Crédito de Imágenes: Free JPG | El Comercio | Diario Huarpe | Búsqueda de Imágenes de Google

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