Biometría del Iris, reconocimiento y funcionamiento

Cuando anteriormente introduje los conceptos básicos y el funcionamiento de la Biometría, había hecho referencia a que existen un sinfín de valores que se emplean en los distintos Sistemas Biométricos y que permiten englobar a distinta técnicas y automatizaciones en torno a un detalle o rasgo en particular que sean inherentes al sujeto a identificar, permitiendo la aplicación de un Algoritmo Biométrico que brinde este reconocimiento en forma ágil y precisa.

Entre ellos, encontramos a la Biometría de Ojo como una de las de mayor difusión, teniendo experimentación inclusive en Lectores Biométricos Portátiles que cuentan con bases de datos actualizables y que son muy útiles en Controles Fronterizos, aunque también tenemos paneles con lectores en Puertas de Acceso donde el sujeto simplemente tiene que acercar su rostro y dirigir su vista hacia algún panel específico, donde la técnica más difundida es la de Biometría del Iris.

¿Qué es el Iris?

Formando parte del Globo Ocular, es lo que todos reconocemos popularmente como el “Color del Ojo”, siendo una membrana pigmentada que está conformada fundamentalmente por Melanina y que posee dos músculos que permiten su contracción para poder dilatar o contraer lo que encontramos en su centro, la Pupila que permite el paso de luz que hace posible la visión.

Es posible su identificación ya que su conformación está estrechamente ligada a Factores Genéticos, teniendo una coloración común a los bebés recién nacidos que varía hasta alcanzar su Color Definitivo a partir de los 6 y hasta los 10 meses desde el nacimiento, dependiendo de ello la Cantidad y Distribución de Melanina, pudiendo variar de una tonalidad azulada a marrón.

Esto, tal como hemos mencionado, está estrechamente ligado a factores hereditarios y a la información genética que provenga de los padres del individuo y que sea aportada para su formación y desarrollo.

¿Cómo se Reconoce?

En la membrana que conforma al Iris Ocular tenemos un dibujo definido y bastante complejo, que puede ser retratado mediante técnicas similes a las fotográficas, y cuenta con unas ramificaciones que se desprenden desde el centro de la imagen capturada (es decir, la pupila) hacia los bordes exteriores que son linderos a la Membrana Esclerótica (comúnmente conocida como la “parte blanca del ojo”)

Esta captura se realiza mediante la incidencia de una Iluminación Infrarroja en forma directa, que permite obtener una captura en Escala de Grises que es posteriormente procesada para un mayor rendimiento de la misma, mediante la técnica de Estiramiento de Histograma, lo que deriva en un mayor contraste entre los distintos grises y así obtener Valores Vectoriales.

Estos vectores son derivados a Coordenadas y las mismas son llevadas a un procesamiento que el Algoritmo Biométrico podrá almacenar y generar un nueva entrada o bien poder comparar con la base de datos ya existente pudiendo identificar al sujeto.

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